Hoy en día los niños están permanentemente expuestos a muchos estímulos. En la era de las redes sociales, parece difícil despegarlos de las pantallas. Pero en realidad, no es tan complicado. Sólo hace falta recordar aquellas cosas que nos encantaban de chicos, como salir con amigos, inventar historias o jugar con burbujas.
Todos los niños aman jugar con burbujas, no importa la edad o la época que les toque vivir. ¡Si hasta los adultos nos quedamos encantados con ellas!
Por eso, estas ideas para hacer burbujas súper originales te van a encantar. Podrán jugar todos juntos, y de forma súper barata.
Receta tradicional
Bueno, hacer burbujas de hecho es tan simple como mezclar una medida de agua con dos medidas de detergente (funcionan mejor los transparentes que los cremosos).
No necesitas un burbujero demasiado sofisticado. Puedes conseguir un poco de alambre, y darle forma circular en la punta.
Si quieres hacer el juego más divertido, puedes darle otro tipo de formas, o utilizar cualquier objeto con orificios. Desde una espátula hasta un molde de cocina, todo sirve.
Descubre con tus hijos cómo la forma de la burbuja va cambiando de acuerdo al burbujero que usen.
Súper burbujas con una botella
Con la misma receta anterior (dos medidas de detergente por una de agua) puedes hacer un burbujero muy original.
Para ello necesitarás:
- Una botella plástica pequeña.
- Un trozo de toalla.
- Banda elástica.
Primero, debes recortar la base de la botella. No debe quedar por la mitad, sino simplemente sin el apoyo.
Allí debes ubicar la tela de toalla y tomarla a la botella con la banda elástica, asegurándote de que quede bien firme.
En un recipiente ancho coloca la mezcla de agua y jabón. Ahora, sólo hay que sumergir la toalla en la mezcla, y soplar por el pico de la botella. ¡A jugar con burbujas!
Burbujas gigantes
¿Tus hijos se quedan maravillados cuando alguien hace burbujas gigantes, en la plaza o en cualquier lado? No es para menos, con lo bellas que son.
La verdad es que, aunque te parezca mentira, no son tan difíciles de hacer. Sólo necesitas la receta correcta. Aunque hay distintas maneras de hacerlo, esta no falla.
Necesitás:
- 12 tazas de agua (si es destilada mejor, aunque el agua del grifo también sirve)
- 1 taza de jabón para lavar platos (preferiblemente que no sea ningún “ultra” concentrado, aunque funciona bien igualmente)
- 1 taza de maizena
- 2 cucharaditas de levadura química (tipo Royal)
- 2 cucharaditas de glicerina (hay muchísimas tiendas online donde lo podéis encontrar, las típicas de repostería tienen todas).
Primero, disolvé la maizena en el agua, y revolvé bien hasta que quede bien distribuida. Luego, añadí el resto de los ingredientes, y mezclá suavemente.
Añadí el resto de ingredientes mezclando suavemente.
Dejá reposar durante al menos una hora. Si ves que la maicena se acumula en el fondo, revolvé un poco suavemente.
Con la mezcla de jabón lista, hay que hacer la herramienta para hacer burbujas. Se puede utilizar una raqueta sin cuerdas, por ejemplo.
Otra idea es usar dos pajitas de beber por las cuales introducimos una cuerda (6-8 veces más larga que la longitud de una pajita). Le hacemos un nudo y ya tenemos nuestra cuerda para hacer las burbujas.
